viernes, 26 de abril de 2019

Poema incompleto







¿Y si nos arrepentimos todos?

Digo, todos: vos, yo, tu vieja y la mía.

Tu tía (aunque no haya más)

Digo, si se arrepiente el acusado (y acusa)

Si se arrepiente el juez (y parte)

y el fiscal (que “todos somos…”)

y se arrepiente el abogado

y el ahogado

y el perro, y el gato y la gallina

y el canario cantor

y empieza a cantar el pajarito?

Pendiente de si hilito de voz,

o de yo, que digo:

“Aquella vez, Sr. fiscal, que entré con 17 kilos

de sustancia vegetal no permitida”

Mientras él, (¿fiscal?), preguntaba:

“¿Cómo podemos arreglar?” golpeando mi documento sobre sus uñas prolijas.

Digo, nomás por decir,

si se arrepiente el Diego?

de haberla puesto con la mano cortita,

de tiranosaurio rex, en el arco.

O de esquivar los cinco ingleses (o fueron seis),

y empujarla, despacito, ahí abajo,

en territorio enemigo.

Digo, ¡Que se arrepienta el juez¡

de haber fallado.

¿Y si se arrepiente Sarmiento? 

Soterrado bajo 25 metros de coima sistemática, o sistémica.

Sr. Juez, digo, “Pasé un semáforo en rojo, en San Juan y Pasco el otro día”

“Y una barrera baja” (para volver a Sarmiento y no dispersarme mucho)

Digo, Que se arrepienta de haber dicho.

No lo de las ideas, que no se matan,

sino de lo otro, lo de los gauchos,

y la sangre que corre hasta hoy,

y que siempre es la misma.

Digo, por decir nomas: si se arrepiente Hitler?

Y aparece de repente una carta manuscrita, pidiendo ser incluido…

Y si se arrepiente el San toro?

Y la santa vaca?

Y la Santa madre iglesia?

De los pecados pedófilos curas que enferman,

y de haber bendecido cada acto castrense

o no castrense en las mazmorras.

Digo, si se arrepiente la Bullrich?

Ah, no, esa ya se arrepintió, (por eso está acá, o ahí, que acá es otro lado)

Y si se arrepiente el hada Patricia?

Y Heidi, y Lilita, y Laurita?

O la aguadita en su taller clandestino?

“Me arrepiento por el vino” (dice Patricia con su boca torcida)

¿Y el gendarme?

¿Qué pasa si se arrepiente el gendarme?

“Dejen darme vuelta” dice.
¿Y si muere?

¿Y si muere la muerte minutos antes de arrepentirse y confesar?

¿Y San Martin? 

En su “angustia” por liberarse de la España madre patria.

¿Si se arrepiente de haber cruzado los andes?


Esos hondos, profundos abismos que nos separan,
y a su vez son la columna que nos sostiene y une.

Digo, si no hubiera patria.

¿Qué abismo habría que cruzar?

Cuál sería el puente que me abrazaría a mi hermano,

o al tuyo, porque esto no es nada personal.

Digo, puente, mano tendida,

abrazo, compañero.

Ya es hora.

                                                                              20-04-2019

1 comentario:

Guitarras Luiggi dijo...

Genial el blog

Hoy me desperte acordandome de Las Virtudes del Petardo, y buscando la letra llegue hasta este lugar

Veo por acá y por allá señas de que anduvimos por los mismos caminos, yo dejo acá perdido este mensaje;

Ojalá algun dia nos encontremos en algun cruce de este laberinto desierto y podamos conversar un rato

Saludos!